Solvitur Ambulando es una expresión en latín que significa literalmente «se soluciona andando» y que se aplica a la resolución práctica de los problemas.
No está claro quién la acuñó por primera vez pero se atribuye a Agustin de Hipona (354-430 d.C.), santo, padre y doctor de la Iglesia Católica aunque también aparece en escritos del filósofo griego Diogenes de Sinope ‘el cínico’ (413-327 a.C.).
¿Por qué es interesante?
¿Por qué me resulta interesante como leitmotiv? Porque propone la experimentación como normal fundamental de aprendizaje. Y esto se cumple para casi cualquier ámbito. También en el personal porque conecta perfectamente con mi lado peregrino. Además, los resultados de un estudio de la universidad de Stanford muestran que una mejor oxigenación propicia la creatividad y con ella la resolución de problemas.
Y si algo no falta en mi mochila, es una libreta donde plasmar esos pensamientos, esas soluciones, esas ideas que te asaltan durante los paseos y rutas cuando no hay otra cosa que puedas hacer que escucharte a ti mismo.
Volviendo a los clásicos, multitud de académicos y filósofos ofrecen como ancla para sus estrategias de resolución de problemas esta frase en latín, Solvitur ambulando. Y por resolver se refiere a casi cualquier cosa.
Caminar y estado de ánimo
Caminar, especialmente en entornos naturales, parece tener un efecto beneficioso como estrategia de recuperación cognitiva y emocional. Este estudio ha encontrado que la práctica de esta actividad se asocia a mejoras en el estado de ánimo, reduciendo el estrés e incrementando la afectividad positiva. Además, favorece el pensamiento creativo y algunas funciones cognitivas, como las relacionadas con la atención y la memoria.
Por otro lado, se podría pensar que en términos del ritmo de vida actual, caminar casi una hora no es algo que muchas personas puedan lograr. Además, nuestras ciudades pueden no facilitar el contacto con la naturaleza. Pero hay que intentarlo. Una encuesta realizada en Japón comparó los efectos de caminar en los parques de la ciudad y hacerlo en las calles de la ciudad. Al caminar por el parque, los participantes se sintieron más cómodos, relajados y enérgicos. Incluso sus emociones negativas y niveles de ansiedad fueron más bajos. En cuanto al tiempo de caminata … solo fueron necesarios 15 minutos.
Ejemplo
¿Sabes quienes son unos grandes Caminantes? Los peregrinos del Camino de Santiago (mira el que pasa por Aragón). Echale un vistazo a las cifras de los últimos años y sorpréndete con los sitios que puedes encontrar (San Juan de La Peña).
Y por supuesto, estamos diseñados para andar… eso significa Solvitur Ambulando.