Hacer el Camino de Santiago por Aragón y no acercarse al Real Monasterio de San Juan de la Peña es una oportunidad perdida para descubrir una parte fundamental de la historia misma de Aragón. La ruta de acceso también permite visitar Santa Cruz de la Serós y todo el entorno natural del Paisaje Protegido de San Juan de la Peña y Monte Oroel.
En San Juan de la Peña podrás visitar el monasterio viejo, el nuevo y dentro de éste, dos centros de interpretación: uno dedicado a la historia del monasterio y el otro al origen del Reino de Aragón. Es una de las zonas de éste último donde se puede observar la relación con el Camino de Santiago.
Más abajo podréis ver unas fotos esféricas del claustro y la zona interior.
Variante del Camino de Santiago Aragonés
Si estás haciendo el Camino Aragonés, tendrías dos opciones:
- Pasar un día en Jaca y acercarte en autobús o coche para disfrutar del entorno y sus senderos.
- Recorrer la variante desde Jaca a San Juan de la Peña y terminando en Santa Cruz de la Serós haciendo un total de 25km o llegando al trazado original en la localidad de Santa Cilia. Según las fuerzas y el horario, se puede extender hasta Arrés pero tendrás una etapa de casi 40km. Os dejo la etapa en Wikiloc y la info de Gronze.
Historia y significado
El antiguo monasterio fue construido en el año 920. Recordemos que Alfonso II el Casto, Rey de Asturias que confirmó los restos encontrados en Iria Flavia como pertenecientes a Santiago el Mayor, peregrinó por primera vez hacia el 820-830 siguiendo el Camino Primitivo. Es decir, apenas un siglo antes de la fundación del monasterio.
San Juan de la Peña recoge la historia de un monasterio cuyo desarrollo por reyes y nobles aragoneses fue central en la creación del Reino de Aragón. Primero los reyes de Navarra como García Jiménez y los condes de Aragón como Galindo Aznárez, en los siglos IX y X favorecieron al pequeño monasterio de San Juan Bautista. Otros reyes hasta Sancho el Mayor continuaron esta protección. El monasterio llegó a ser lugar de enterramiento de nobles y reyes aragoneses. Aquí se encuentran los restos de Ramiro I, Sancho Ramirez y Pedro I de Navarra y Aragón. Por su estratégica posición, fue centro cultural y espiritual de los aragoneses durante la reconquista.
En el siglo XI, el monasterio pasó a formar parte de la orden benedictina y fue el primer monasterio de España en utilizar la misa en latín. El Real Monasterio de San Juan de la Peña fue declarado Monumento Nacional el 13 de julio de 1889.
La leyenda dice que el cáliz de la Última Cena, el Santo Grial, fue enviado al monasterio para protegerlo y evitar que fuera capturado por los invasores musulmanes de la Península Ibérica. Se dice que es el mismo cáliz que fue regalado en 1438 por Alfonso V de Aragón a la Catedral de Valencia. Aquí puedes leer más sobre la Ruta del Santo Grial en Huesca y su periplo desde tiempos de San Lorenzo, diácono del Papá Sixto II. Otra de las rutas que merece la pena recorrer.
Santa Cruz de la Serós
Mención especial merece esta localidad a la que pertenece el Monasterio de San Juan de la Peña. La iglesia de Santa María y la ermita de San Caprasio están enmarcadas a los pies de San Juan de la Peña.
